Vamos con un plato genial, quizás más para la cena, pero te lo puedes comer a cualquier hora como almuerzo como comida. Son unas albóndigas de lentejas que quedan muy ricas, son súper fáciles de hacer muy nutritivas.
Seguro que los más pequeños verán esta receta como una forma muy divertida de comer legumbres.
¡Vamos a ello!
Pasos de la receta:
- Preparamos una sartén caliente y añadimos los champiñones picados, poco a poco irán soltando su jugo, los cocinamos un poco y quitamos el jugo para luego seguir cocinándolos unos 5 minutos hasta que reduzcan su tamaño considerablemente.
- Agregamos la cebolla cortada fina y los ajos también cortados bien pequeños, dejamos que todo se incorpore bien, podemos añadir un poco de aceite de oliva para cocinarlo todo mejor y quede mas jugoso, seguimos por unos 5 o 10 minutos mas.
- Sazonamos un poco con salsa de soja y con algunas especies al gusto, nosotros hemos añadido sal, pimienta blanca, comino y un poco de pimentón dulce.
- Los champiñones ya se están bastante pequeños y están empezando a dorarse, apagamos el fuego y añadimos el perejil picado y removemos bien.
- En un recipiente agregamos las lentejas cocidas y las machacamos muy bien hasta hacerlas puré, añadimos la mezcla de champiñones y revolvemos bien.
- Agregamos la avena molida o harina de avena, una pizca de orégano y pasta de sésamo si no tienes, puedes utilizar alguna crema de almendra o de cacahuate que no esté endulzada.
- Vamos a formar nuestras albóndigas, las guardamos en la nevera unos 10 minutos antes de usarlas, podemos freírlas, o usarlas en alguna salsa, nosotros la hemos hecho al horno durante unos 10 minutos a 180 grados y quedan muy jugosas.
Ingredientes utilizados:
- Medio kilo de champiñones
- Media cebolla grande
- 4 ajos
- Aceite de oliva
- Salsa de soja baja en sal
- Un cuarto de taza de perejil
- Una taza de lentejas cocidas
- Media taza de avena molida o harina de avena
- Una pizquita de orégano
- Pasta de sésamo
Otra receta realfooder que te hará olvidar los ultra procesados y te ayudará a aprender a comer sin necesidad de usar la proteína animal si lo necesitas y de manera sana y nutritiva.
¡No olvides que toda receta lleva un toque personal así que añade el tuyo para hacerla aún mejor si cabe!
¡Buen provecho!